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Torrelavega muestra una cara más amable con la inversión en zonas de ocio infantil
El primer parque cubierto de la ciudad, el Manuel Barquín, es el de mayor aceptación entre los 45 espacios de juego que ya tiene el municipio

03/03/2019

Zona de juegos del Manuel Barquín, el mayor parque de la ciudad. Criticado al principio por su coste e impacto visual, ahora es 'copiado' ahora por otros municipios.

Los pequeños de Torrelavega están de enhorabuena. El paulatino descenso de la población y la tasa de natalidad está obligando al Ayuntamiento de Torrelavega a dar un giro en cuestiones a las que antes prestaba poca atención. Un ejemplo de ello es que en la legislatura que ahora acaba ha invertido más de un millón de euros en zonas de ocio infantil, con el fin de que la ciudad ofrezca una cara más amable, un mejor servicio a las familias. La actuación más destacada ha sido también la que tiene mayor aceptación: el primer parque infantil cubierto del municipio, ubicado en el Manuel Barquín. Pero ha habido otras novedades este mandato, como la introducción en las áreas de juego de aparatos aptos para niños con discapacidad y sin ella, o la creación de pequeños parques en el centro urbano para que las calles y plazas no sólo sean lugares de paso. Otro hecho relevante es que todas las zonas de ocio infantil son diferentes, para invitar a los pequeños a recorrerlas y disfrutar de todas ellas.

El concejal de Parques y Jardines, José Luis Urraca Casal, explica que todo es fruto de la demanda vecinal: «La gente nos pide parques y se pueden ver llenos de niños con sus familiares». Recuerda que ciudades como Vitoria tienen áreas de juego infantil casi en cada manzana y en Cantabria, municipios como Reocín tiene 22 parques infantiles, Bezana 25 y Piélagos 35. En el caso de Torrelavega, son 45 y pasarán a ser 48 cuando finalice la instalación del nuevo de La Llama y se terminen el del Ara del Dobra en Sierrapando, junto a la pista deportiva, y el que va incluido dentro del área de descanso de Torres, ambos en fase de licitación para su ejecución.

Están distribuidos por toda la ciudad, fundamentalmente por los barrios, tratando de que todos los núcleos de población tengan un parque infantil dentro de un área de proximidad razonable. Los hay de gran tamaño, que son los más utilizados por su emplazamiento en los lugares más poblados, y también los hay pequeños con algún columpio y muelles para dar servicio a zonas con menos habitantes, generalmente alejadas del centro urbano.